La accesibilidad a la Inteligencia Artificial (IA) ofrece grandes oportunidades, pero también presenta desafíos significativos. En CGI, promovemos el uso de la IA, incluyendo la IA Generativa, como una herramienta para alcanzar objetivos empresariales y sociales, siempre bajo el principio de la Inteligencia Artificial Responsable (IAR). Esto implica asegurar que las soluciones de IA sean éticas, responsables y conformes a la normativa, contribuyendo así a los objetivos ESG (medioambientales, sociales y de gobernanza) de las empresas.
La IAR se basa en tres pilares fundamentales: robustez, ética y confiabilidad. La robustez se refiere a la rigurosidad en los procesos de diseño, desarrollo, pruebas y operaciones con IA, garantizando la privacidad y seguridad. La ética implica alinear los objetivos de la IA con valores humanos que promuevan la justicia y la inclusión. La confiabilidad se asegura mediante sistemas explicables, interpretables y transparentes, asegurando la responsabilidad y el control de las tecnologías de IA utilizadas. Este enfoque permite a las organizaciones confiar en sus iniciativas de IA y en los resultados obtenidos.
En CGI, la IAR no solo es una necesidad ética, sino también un imperativo empresarial. La relación entre la IA, la reputación y el éxito financiero es directa, y las empresas deben ofrecer confianza y asumir responsabilidad social. Además, la rápida evolución de la regulación hace imprescindible adoptar un enfoque responsable. Aplicamos la IAR para avanzar en los criterios ESG, colaborando en proyectos innovadores como el uso de IA para combatir el cambio climático y mejorar la eficiencia energética. La capacitación continua y el cumplimiento normativo son esenciales para garantizar que la IA beneficie a la sociedad de manera sostenible.
Descubre más sobre cómo CGI está aplicando la IAR para hacer avanzar los criterios ESG, de la mano de Alberto Anaya, Director General y Business Unit Leader de CGI para España, en el artículo publicado por Corresponsables